Innovar es evolucionar
Muchas empresas sienten que las iniciativas de innovación son excelentes durante los buenos momentos, pero superfluas en momentos difíciles. Es común que las empresas redireccionen los esfuerzos de su equipo de innovación cuando las cosas van mal; es decir, los hacen enfocarse en la actividad –o producto– principal del negocio.
Sin embargo, enfocarse únicamente en el negocio principal durante un momento difícil no soluciona las cosas; por el contrario, acelera la caída. Es necesario evolucionar para salir de la crisis.
Desgraciadamente, lo opuesto es lo que funciona: cuando los tiempos son difíciles es cuando necesitas innovar más. En este sentido, definamos “innovación” como evolución corporativa, un cambio natural que hace un organismo para sobrevivir a nuevas condiciones.
La idea que prevalece es que la innovación es para el “futuro”, no para el “ahora”; que no es esencial para el negocio, que es una pérdida de dinero pues desvía recursos del negocio principal, que es el que genera ingresos. Pero la pregunta es: ¿si la actividad principal del negocio genera buenos ingresos, entonces por qué estás teniendo problemas? ¿Por qué los tiempos difíciles te están afectando?
Es un mito popular que nuestros cuerpos se renuevan cada 7 años. Durante ese tiempo, todas nuestras células mueren y son remplazadas con nuevas. La realidad es que algunas de nuestras células (como las del cerebro) duran toda la vida, y otras solo algunos días. La mayor parte de nuestro cuerpo se renueva continuamente, todo el tiempo. La vida nunca es estática, siempre hay cambio y evolución.
De manera similar funciona tu empresa: al tiempo que desarrolla productos, servicios y procesos, tiene que cambiar y crecer. A veces crece lentamente debido a factores internos, y otras veces cambia rápido cuando necesita mantenerse viva. Así como el cuerpo humano, partes de ella también mueren, pero nuevos programas, iniciativas y productos reemplazan a los viejos.
Este cambio es evolución. Este cambio es innovación. El programa de innovación de una empresa no es algo superfluo de lo que se puede prescindir cuando los tiempos son difíciles, es un aspecto necesario para mantener la compañía a flote.
La innovación no solo se encuentra en el futuro, sino en nuevas maneras de optimizar el ahora. La innovación puede detonar reducciones de costos, incrementar los ingresos y descubrir nuevas fuentes de ingreso que ni sabías que existían.
Curiosamente, algunas de las ideas innovadoras más efectivas no vendrán de ver hacia el futuro, sino de ver a tus propios empleados. Si esas buscando ideas para aumentar tus ganancias y cortar gastos, es muy probable que la fuente sea interna.
Aunque suene contradictorio, los tiempos difíciles son exactamente cuando necesitas innovar más. Cuando la innovación se vuelve algo necesario, es quizá ya muy tarde. Como dice el dicho: “Hay que prepararse para la guerra en tiempos de paz”; en otras palabras, hay que evolucionar e innovar continuamente.